CÉSAR
A CRASO:
¡Estoy
harto de Roma!. Durante casi diez años he estado encarcelado aquí... ¡estoy
impaciente por marcharme! ¿Diez años en el campo de batalla? ¡Oh, Marco, ésa es
una perspectiva
deliciosa! Hacer algo que es mucho más natural para mí que ninguna otra cosa, recogiendo
una cosecha para Roma, ensalzando mi dignitas, y no tener que aguantar
los gimoteos y las críticas de los boni. En el campo de batalla soy yo
el que tiene la autoridad, nadie puede contradecirme. ¡Es maravilloso!
RESPUESTA DE CRASO A CÉSAR:
-Sí,
pero la diferencia es que yo no quiero gobernar el mundo entero, sólo la parte económica.
Las cifras son tan concretas y exactas que los hombres se asustan sólo de
verlas a menos que tengan un auténtico talento para ello. Mientras que la
política y la guerra son muy difuminadas. Todo hombre piensa que si tiene
suerte puede ser el mejor en cualquiera de ellas. Yo no me meto con la mos
maiorum y dos tercios del Senado tienen mi misma clase de autocracia, así de
simple.
No hay comentarios:
Publicar un comentario