domingo, 14 de mayo de 2023

DESTRUCCIÓN DE HIPONA POR LOS VÁNDALOS

La visión católica de la destrucción vándala es catastrofista. Inminente ya el asedio de la ciudad de Hipona, Possidio de Calama describía de la siguiente forma los efectos de la destrucción bárbara:

[...] Mas poco después, por voluntad y permisión de Dios, numerosas tropas de bárbaros crueles, vándalos y alanos, mezclados con godos y otras gentes venidas de España, dotadas con toda clase de armas y avezadas a la guerra, desembarcaron e irrumpieron en África; y luego de atravesar todas las regiones de la Mauritania penetraron en nuestras provincias, dejando en todas partes huellas de su crueldad y barbarie, asolándolo todo con incendios, saqueos, pillajes, despojos y otros innumerables y horribles males. No tenían ningún miramiento al sexo ni a la edad; no perdonaban a sacerdotes y ministros de Dios, ni respetaban ornamentos, utensilios ni edificios dedicados al culto divino [...]; por eso, más de lo acostumbrado se alimentó Agustín de Hipona del pan de lágrimas día y noche; y los últimos días de su senectud llevó una existencia amarguísima y más triste que nadie. Pues veía aquel hombre las ciudades destruidas y saqueadas; los moradores de las granjas, pasados a cuchillo o dispersos; las iglesias, sin ministros ni sacerdotes; las vírgenes sagradas y los que profesaban vida de continencia, cada cual por su parte, y de ellos, unos habían perecido en los tormentos, otros sucumbieron al filo de la espada; muchos cautivos, después de perder la integridad de su cuerpo y alma y de su fe, gemían bajo la dura servidumbre enemiga.




No hay comentarios:

Publicar un comentario