Entre los romanos, llevar anillo
era un derecho reservado a los ciudadanos de clase elevada. Los senadores de
las familias más antiguas solían llevarlo de hierro, siguiendo la tradición, y
el resto lo llevaban de oro, aparte de los sacerdotes del templo de Júpiter que
también llevaban anillo de oro como símbolo de su elevado estatus social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario