El eclecticismo (del griego eklegein, «escoger») es, en filosofía, una escuela filosófica nacida en Grecia que se caracteriza por escoger (sin principios determinados) concepciones filosóficas, puntos de vista, ideas y valoraciones entre las demás escuelas que se asumen que puedan llegar a ser compatibles de forma coherente, combinándolas y mezclándolas aunque el resultado pueda ser a menudo contrapuesto sin llegar a formar un todo orgánico.
DEFINICIÓN
El eclecticismo es un enfoque conceptual que no se sostiene rígidamente a un paradigma o un conjunto de supuestos, sino que se basa en múltiples teorías, estilos, ideas para obtener información complementaria en un tema, o aplica diferentes teorías en casos particulares. También pretende conciliar las diversas teorías y corrientes existentes, tomando de cada una de ellas lo más importante aceptable, permitiendo romper las contradicciones existentes, su principal representante fue Cicerón.
HISTORIA Y DESARROLLO
El eclecticismo apareció en Grecia a partir del siglo II a. C (Cesar León y Platón), como una forma de sintetizar los grandes hallazgos intelectuales de la filosofía clásica anterior de los presocráticos, Platón y Aristóteles. Por ejemplo, Antíoco de Ascalón compaginó el estoicismo y el escepticismo, y Panecio de Rodas basó su pensamiento en el platonismo y el estoicismo.
Los pensadores romanos nunca desarrollaron un sistema filosófico propio, inclinándose por este tipo de pensamiento: Cicerón, por ejemplo, asimiló teorías del estoicismo, del escepticismo y de los peripatéticos.
Entre los cristianos, Clemente de Alejandría y Orígenes combinaron la metafísica griega y las ideas judeocristianas de las Santas Escrituras. Ya a fines de la Edad Media, el maestro de la Devotio moderna, Maestro Eckhart formuló un sistema de filosofía cristiana basado en Aristóteles, sus comentaristas árabes medievales, el neoplatonismo y la Cábala o mística hebrea.
ECLECTICISMO EN EUROPA
En España, desarrolló en el seno de la Ilustración del siglo XVIII como única escuela alternativa a la escolástica dominante sin suscitar los recelos de la Inquisición y en ese sentido destacan pensadores como Benito Jerónimo Feijoo o el médico y lógico Andrés Piquer.
En el siglo XIX rebrotó aún el eclecticismo en Francia a través de la obra del filósofo Victor Cousin, que trató de unir el idealismo de Emmanuel Kant, la filosofía del sentido común y las doctrinas inductivas de René Descartes.
EL PROBLEMA BÀSICO EN CONTRA DE LA ADOPCIÒN DEL ECLECTICISMO COMO UNA VERDADERA FORMA DE VIDA, ESTRIBA EN EL DESEO DEL SER HUMANO, EN PARTICULAR EN EL GÈNERO HOMBRE, DE SER EL ÙNICO POSEEDOR DE LA VERDAD, CONSIDERANDO QUE EL PARADIGMA ES TAMBIÈN EL ÙNICO CAMINO EXISTENCIAL...VANIDAD, OH VANIDAD...
ResponderEliminarY POR CIERTO EL COMPLEMENTO DEL ECLECTICISMO, Ò SU PRINCIPIO, SERÌA EL REDESCUBRIMIENTO DE EL CAMINO A EULESIS Y SUS MISTEROS...CONTANDO CON ESA EXPERIENCIA, EL HOMBRE PODRÌA ASPIRAR A SER TAN FELIZ COMO PUEDE SER Y ES, LA MUJER, SI LA DEJARA EL PROPIO HOMBRE
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