«Del mismo modo que los médicos siempre tienen a mano los instrumentos de
hierro para las curas de urgencia, así también conserva tú a punto los
principios fundamentales para conocer las cosas divinas y las humanas y así
llevarlo a cabo todo, incluso lo más insignificante, recordando la trabazón
íntima y mutua de unas cosas con otras. Pues no llevarás a feliz término
ninguna cosa humana sin relacionarla al mismo tiempo con las divinas, ni
tampoco al revés».
( Marco Aurelio )
Esta frase del
emperador romano Marco Aurelio proviene de su libro “Meditaciones”. Creo que la enseñanza basada en esa frase de Marco
Aurelio es la siguiente: Mantén siempre presentes tus principios fundamentales
para comprender tanto las cosas divinas como las humanas, reconociendo la
interconexión entre ambas. Así podrás llevar a cabo cualquier tarea, por más
insignificante que parezca, de manera más efectiva y trascendente. Al relacionar
las cuestiones humanas con las divinas y viceversa, encontrarás un equilibrio y
sentido más profundo en todas tus acciones y decisiones. Los principios
fundamentales actúan como guías para enfrentar los desafíos de la vida, al
igual que los médicos tienen a mano los instrumentos de hierro para las curas
de urgencia. No podrás alcanzar el éxito en tus proyectos humanos si no
consideras los principios divinos, ni comprender adecuadamente lo divino sin
tener en cuenta tus experiencias humanas. Mantén tus conocimientos actualizados
y recuerda la trabazón íntima y mutua de todas las cosas. De esta manera,
podrás actuar con sabiduría y encontrar un sentido trascendente en todo lo que
hagas.
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