domingo, 30 de abril de 2017

LA PRISIONERA DE ROMA, por José Luis Corral









CURA CONTRA LOS ESPASMOS MUSCULARES Y LAS MAGULLADORAS


Los espasmos musculares y las magulladuras los curan con excremento de jabalí recogido en la primavera y secado; así curan también aplicándolo fresco en linimento a los conductores de cuadrigas que han sido arrastrados o heridos por una rueda y sufren cualquier tipo de hematoma.


( Plinio en "Historia natural")



















SÉNECA DICE SOBRE LA BORRACHERA



La embriaguez no es otra cosa que una locura voluntaria. 






PLUTARCO DICE SOBRE LA MUERTE DE NERÓN


A la muerte de Nerón, los espíritus infernales se disponían a convertirlo en víbora, por haber matado a la que lo había llevado en su seno, pero de repente apareció una luz deslumbrante de la cual salió una voz que ordenó que lo transformaran en una criatura menos repulsiva, un animal que cantara junto a los lagos y los pantanos.


( Plutarco en "De la tardanza de la divinidad en castigar")



LAS INSULAE DE LA SUPERPOBLADA ROMA


La inmensa mayoría de la población de Roma vivía en edificios de apartamentos de varias plantas llamadas insulae ( literalmente "islas", de ahí el término italiano isolato, que significa " bloque, manzana" de una calle).

 


Las insulae eran notoriamente sórdidas, estrechas y muy vulnerables al estallido de incendios. En un catálogo de las regiones de la ciudad del siglo IV d. C. , aparecen registradas 46.602 insulae, pero sólo 1797 casas individuales (las domus). 









TÁCITO DICE SOBRE LOS CUATRO EMPERADORES


Pongo mano a una historia pródiga en desgracias, llena de atroces batallas, plagada de discordias a causa de sediciones, temible incluso en la misma paz. Cuatro príncipes perecieron por la espada.


( Tácito en "Historias" ) ( se refiere a las convulsiones que hubieron desde Nerón y los breves reinados de Galba, Otón y Vitelio, dando paso a un período de mayor estabilidad con Vespasiano)




REMEDIO CONTRA LA PICADURA DE ESCORPIÓN



Cuentan que si uno dice a un burro al oído que ha sido picado por un escorpión, el mal pasa al animal inmediatamente.


( Plinio en "Historia natural")








LOS EGIPCIOS, por Cyril Alfred









CAYO CASIO LONGINO DICE SOBRE LAS GRANDES HAZAÑAS



En las grandes hazañas es glorioso incluso fracasar. 




ALCIFRÓN


Alcifrón (griego antiguo Ἀλκίφρων Alkíphrôn) fue un escritor griego del siglo II contemporáneo de Luciano, el más famoso epistológrafo ateniense de su época, perteneciente a la Segunda sofística.

Se conservan ciento dieciocho de sus cartas escritas en lengua ática con un elegante estilo arcaizante y recopiladas en cuatro libros:

Cartas de pescadores.
Cartas de labradores.
Cartas de parásitos.
Cartas de cortesanas.



De Alcifrón no se conoce más que el nombre. Desde antiguo se le ha supuesto contemporáneo de Luciano, con el que comparte ciertas características de estilo. Sus cartas evocan un ambiente semejante al de ciertos diálogos, como los Diálogos de las cortesanas de Luciano, las cartas de conversaciones de Alcifrón evocan conversaciones, chismorreos, y coqueterías de la amable Atenas de Menandro. También se han visto entre uno y otro ciertos ecos de concomitancias. Aticismo, gracejo, frescura y un afectado realismo, mímesis de tipos y caracteres, un tanto de sainete, un ligero preciosismo, buen gusto y pequeños detalles muy bien dibujados, tales son las marcas de este retratista de una curiosa sociedad, vista en estos breves cuadros a la manera de breves mimos costumbristas. Los pescadores y los campesinos pertenecen a un ámbito que estaba de moda recrear con un fingido naturalismo; las cortesanas y los parásitos son gente ociosa y marginal de la sociedad ciudadana. Con sus maliciosas anécdotas y sus menudas peripecias, trazan un polícromo cuadro de costumbres, con la refinada artesanía helenística que caracteriza a este escritor. Forma un tanto artificial la de la carta para estos rápidos bosquejos, pero adecuada para rehuir la solemnidad y el envaramiento, y para dar una sensación de vivaz costumbrismo. Algunas de sus cartas, como la de Lamia a Demetrio, son consideradas como modelos del género epistolar.