Cicerón encabezaba la lista negra del triunvirato formado en el año 43 por César Octavio, Marco Antonio y Lépido. Cuando se enteró, intentó huir de Roma, pero fue descubierto y asesinado en plena calle, donde le cortaron la cabeza, y luego su cabeza y sus manos ya cortadas se expusieron en público, como castigo ejemplar. Pero antes Cicerón le dijo a su verdugo:
“NO ES NADA ADECUADO LO QUE ESTÁS HACIENDO, PERO TRATA DE MATARME ADECUADAMENTE”
No hay comentarios:
Publicar un comentario