La identidad del heredero de la gran fortuna y
las propiedades de César tiene la misma importancia que... que un higo. Lo
importante es quién herede su legión de fieles, que es muchísimo mayor. Además,
¿qué te crees, que seguirían a un chaval de dieciocho años que está tan crudo
como la carne recién salida del matadero, tan verde como la hierba, y tiene la
ingenuidad de un zagal? Ojo, no te niego que Octavio tenga posibilidades, pero
hasta yo, niño prodigio reconocido, tardé unos cuantos años en madurar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario