LUCIO CALPURNIO PISÓN, ALBACEA DE CÉSAR, LEE SU BREVE TESTAMENTO EN LA DOMUS PÚBLICA DELANTE DE LA VESTAL SUPERIOR QUINCTILIA , Y OTRAS TRES VESTALES DE TESTIGOS, Y ANTE PRESENCIA DE MARCO ANTONIO

( Líquidez mínima de Cayo Julio César: unos cincuenta mil talentos, amén de numerosas otras propiedades )

 

(...) Las siete octavas partes para Cayo Octavio al que ha adoptado formalmente como hijo suyo, que debía ser reconocido en adelante como Cayo Julio César ; una octava parte a repartir entre, Quinto Pedio, Lucio Pinario, Décimo Bruto (éste quedará excluido porque es uno de los asesinos), y mi hija Calpurnia.

 

(...) Aparte César dispone que se entreguen de su propia fortuna personal trescientos sestercios a cada ciudadano romano, y el uso público de los jardines de su propiedad al otro lado del Tíber.